miércoles, 2 de abril de 2008

¡Por fin juntos!

Por fin llegaron Yolanda y Otis. Algo desmejorados por 24 horas de duro viaje y atormentados por el jet-lag. Pero aquí están. Ha sido un emocionante reencuentro. Un mes es bastante, aunque a algunos os pueda parecer una gilipollez. Espero poder contaros más cosas de Melbourne en los próximos días, a medida que vayamos descubriendo la ciudad. Ayer lo intentamos pero unos vientos huracanados nos lo impidieron. No es una exageración ya que salió en las portadas de todos los periódicos locales y se ha cobrado 2 víctimas (http://www.theage.com.au/articles/2008/04/02/1206851013791.html).
Aquí tenéis un par de instantáneas. Ahora nos vamos a ir a dar un paseo por el barrio, porque el hombre del tiempo promete nuevas ventoleras y casi mejor no ir a la city.






3 comentarios:

Anónimo dijo...

Encantado de oir que eres algo más feliz. Una familia encantadora.

Ala, a divertirse. Cuidado con los huracanes, y si te tapasa por la noche no tendrás frio.

Centauro Del Desierto dijo...

Conéctate al skype y dile a Dios que apague el ventilador o lo direccione hacia otro lao.
Saludos a todos.
Seguro que Otis está desesperado por ver a los bicharracos autóctonos.
No dejes de escribir y fotografiar.

Anónimo dijo...

¡Hey, tío! Me he enterado de rebote que estás aquí.

Me piré sin despedirme de tus dependientes. Ya lo arreglaremos de algún modo.

En cuanto acabe con un par de asuntillos te escribo un email, privado. Privado, por no ser público, porque me complace y por ir bebido. ¿O qué?